lunes, 14 de noviembre de 2011

Análisis: El Sur, Jorge Luis Borges

En el siguiente ensayo analizare el doble linaje, las claves autobiográficas, cómo se genera la ambigüedad, en El Sur, el cuento de Jorge Luis Borges.
Cuando leemos este texto es inevitable no leerlo como una autobografía del autor, ya que utiliza analogías (Francisco Flores - Francisco Borges) y juega con sus dos linajes y los del personaje, Dahlmann: Alemán-Argentino para Juan, y Ingles-Argentino para Jorge Luis. Francisco Borges murió en el frente de batalla en la guerra con el Paraguay (un tipo de muerte que Borges admiro), y no por pura casualidad Francisco Flores muere luego de que una lanza le atravesara en pecho. Tanto Borges como Dahlmann sentían cierta fascinación con esa muerte romántica, lo que genera ambigüedad debido a que el protagonista de la historia muere internado en un hospital, cuando esa no era la muerte que quería para él. Incluso cuando estaba soñando o alucinando, imagina tener una pelea con un compadrito en un bar, donde el mozo lo llama por su nombre, cuando en realidad no lo conocía.
Otro dato autobiográfico que genera ambigüedad es la septicemia que padece Dahlmann; a partir de ahí debemos comenzar a leer el texto en clave onírica. Borges también sufrió una septicemia en 1939 (año que también se menciona en el texto y que da otro dato autobiografico: la estancia que ni Borges ni Dahlmann visitaban). Esta enfermedad genera que Juan alucine/sueñe todo lo que se cuenta en el relato, algo que no debelamos sino hasta el final del cuento. Borges sobrevivió a esa septicemia, por lo que, si lo leemos mera y exclusivamente como una autobiografía, podemos interpretar que Dahlmann sobrevivió y si es real lo que sucedió a continuación.
"A la realidad le gustan las simetrías y los leves anacronismos" puede leerse como una explicación de todo el texto: cuento simétrico con ciertos anacronismos (el coche de plaza; la ciudad que se describe luego de esa frase no concuerda con el año). Esa frase es una pauta de lectura importantísima, ya que indica que a partir de ese momento debemos leer el texto en clave onírica. En los párrafos siguientes se relata una alucinación de Dahlmann, dentro de la cual podemos encontrar otra pauta de lectura: "El hombre vive en el tiempo, en la sucesión, y el mágico animal, en la actualidad, en la eternidad del instante". En esa alucinación también encontramos la utilización  de un intertexto de una forma clave: cuando compara Las mil y una noches con su vida. Utiliza palabras como genio, bienhechor, que pueden relacionarse con un lenguaje fantástico, así como la frase: "La montaña de piedra imán y el genio que ha jurado matar a su bienhechor eran, quien lo niega, maravilloso, pero no mucho mas que la mañana y que el hecho de ser".
Los intertextos cumplen la función de representar sus dos linajes: Martín Fierro (no solo linaje argentino, sino también una muerte romántica, mencionada anteriormente) y Las mil y una noches, un ejemplar descabalado de Weil (escritor alemán, mismo linaje). Así como también lo explicado anteriormente.
El sur es un símbolo bisémico, donde se encuentra la afirmación de Dahlmann, que dice que el sur es un mundo mas antiguo y firme, aunque ir al sur solo representa cruzar una calle. Y el otro, el Sur de Dahlmann, ese sur que resuelve que acepte el duelo con el compadrito. Otra analogía que utiliza es la de la aguja (cuando entra al hospital por la septicemia) y el cuchillo que empuña el compadrito.
En el ultimo párrafo, la utilización de los verbos en sus distintos modos cumplen un rol clave: hubiera: pretérito  pluscuamperfecto, modo subjuntivo; lo que genera imposibilidad. Hubiera podido: no pudo. A pesar de esto, en la ultima linea dice: "Dahlmann empuña con firmeza el cuchillo, que acaso no sabrá manejar, y sale a la llanura". Esa frase utiliza el verbo "empuña", presente indicativo, lo que genera una sensación de realidad; lo que genera ambigüedad. A esto se le suma el "acaso no sabrá", que genera duda, ya que se esta metiendo en un mundo desconocido desde el punto de vista de la experiencia, pero conocido desde el punto de vista de la literatura.
En conclusión, podemos afirmar que nunca logramos dilucidar la verdadera muerte de Dahlmann. Las analogías y el juego de linajes juegan un papel fundamental en la estructura del relato, así como también las pautas de lectura.

Lo otro y focalizaciones en Casa tomada, Los otros y La casa de Asterión

En el siguiente análisis veremos los distintos roles que toma "lo otro" en los textos Casa tomada, de Julio Cortazar, La casa de Asterión, de Jorge Luis Borges, y la película Los otros, de Alejandro Amenábar.
En Casa tomada, encontramos una focalización interna y la pregunta acerca de ¿que es lo otro? puede contestarse mediante el desconocimiento de ese ente que va invadiendo la casa. Ellos no oponen resistencia ante eso que se esta adueñando la casa, es mas, no intentan detenerlo (familia terrateniente, ocio aristocrático) y cada vez que avanza lo toman con total naturalidad. Tampoco están interesados en descubrir que es eso que, poco a poco, se esta adueñando de su casa.
En la película de Amenábar ocurre lo contrario que en casa tomada, en relación a lo que sucede cuando los protagonistas se dan cuenta de la existencia de eso otro que habita la casa. En la película deciden enfrentarlo, les surge la necesidad de saber contra que es lo que están lidiando. Un ejemplo claro de eso es la parte en la que la madre corre las cortinas para dejar entrar la luz (y así "ver" eso otro) y, acto seguido, toma una escopeta para enfrentarse a "lo otro". Un punto clave en esta película son los puntos de vista: desde el comienzo nosotros creemos ver la vida de personas vivas que, a medida que avanza la película, encuentran eso otro que no les permite continuar de forma normal, pero en el final nos encontramos con que eso que siempre estuvimos viendo fue la vida de los otros (si asociamos la palabra "otro" con la muerte). De esta manera encontramos una rotación en el punto de vista.
En tanto a La casa de Asterión, encontramos una focalización interna, porque se le da identidad propia a ese Minotauro, el cual no se caracteriza por ser un animal asesino, sino por tener actitudes de un niño, como la de querer jugar constantemente. En este texto también encontramos varios roles invertidos, como el laberinto, que es tomado como una casa, y un Minotauro al cual se le da voz e identidad, inclusive se lo trata como un niño. Asterión puede relacionarse directamente con la palabra contradictorio, ya que es una mezcla de lo que los otros dicen que es y lo que él dice ser.
En conclusión, podemos afirmar que, por más que haya algo desconocido en los textos o la película, los personajes y su forma de actuar frente a eso son los que nos guían o cambian el desarrollo de la historia.